sábado, 6 de noviembre de 2010

EL GRAN BUDA DE LESHAN Y EMEI SHAN.


Dos días más en Sichuan, que repartimos en ver la estatua de buda mas grande del mundo, junto a los rios Daduhe y Minhe en Leshan, y la visita a una de las montañas sagradas del budismo en china, Emei Shan, un entorno natural impresionante, con picos de tres mil metros de altitud, a los cuales se puede ascender fácilmente en telecabina y en los que han edificado templos enormes para la mayor gloria de buda. Amén.


El primer día empieza temprano, nos desplazamos desde Chengdu a Leshan y tras un desayuno bien aderezado de cayena, directos al Gran Buda. Una estatua sedente de 71m de altura tallada en la roca junto a la confluencia de los dos rios, que ya sea gracias al buda o a la cantidad ingente de piedra que se extrajo de la pared, sirvió para calmar las grandes corrientes que se creaban en esta unión de los rios.




La estatua se visita desde todos los ángulos, aunque al no verla desde el río nos perdimos otras dos estatuas más pequeñas que hay talladas justo al lado.
Desde la cabeza, se desciende por un sendero escalonado hasta los pies del buda, foto impresionante. Para continuar la corriente de turistas de nuevo en ascenso por el otro lado para tener otra vista diferente, así como visitar templos conmemorativos y cuevas antíguamente habitadas por monjes poetas budistas.

Tras la visita, comida en el rey del picante (lo típico por aqui) y visita al Evony Museum. Un museo de tallas de Ébano donde pudimos ver tanto exposición de restos petrificados de troncos de ebano de unos 8-10 metros de altura como tallas en la madera de distintos tamaños, desde trocitos a troncos enteros tallados al minimo detalle.
Después una siestecita rumbo a la entrada del parque de Emei Shan, donde nos damos un paseillo por la zona turística antes de la cena. Aquí el picante ya le pasa factura a Isa y tenemos un sustillo, pensabamos que se quedaba sin papilas gustativas, por suerte, un poquito de pan chino y otro poquito de agua a discreccion calmaron el fuego que le salia por la boca, uf!

Con la cena nos invitaron a ver un espectáculo de música, acrobacias, kung fu, y un concurso combinado de talentos donde participó David en representación española, en el que hizo un digno papel hasta que le tocó en suerte la fiera china, que lo apartó del concurso no con poco sufrimiento.


Al día siguiente amanece neblinoso y frío. Nos dirigimos a la cima de Emei Shan, subimos en autobus a unos 2500m de altura, no se ve nada por la niebla. Aquí vemos a uno de los primeros guardianes de la cima, guerreros disfrazados de mono que de vez en cuando exigen peaje a los turistas.



Sin esperanzas de ver gran cosa cogemos el teleférico y justo antes de llegar al final superamos el mar de nubes y vemos la cima con un sol resplandeciente. Impresionantes vistas a unos 3000m donde nos deja el teleférico. De aquí al templo un paseíllo y mejores vistas.


Nos da pena entrar de nuevo en la niebla, pero descendemos de nuevo a otra zona de la montaña, donde abundan los templos y los riachuelos con puentes de piedra preciosos. Nos hacemos unas fotos con los monos, no todo el mundo se atreve, ya que de vez en cuando sacan amenazantes los dientes y arrevatan por la fuerza la merienda de los turistas. A una de ellas, a la que le tiraron una bolsa al suelo en la que llevaba setas, té de la zona y unos tentenpiés, tuvo que ser David en un alarde de caballerosidad el que luchando con el mono recuperó los objertos robados (no lo creeréis pero es cierto), mientras el resto de turistas se escondían donde podían.


Y así todo el resto del día viendo este parque natural que nos ha dejado encantados. Nos vamos acostumbrando al picante porque la última comida nos ha gustado.
De vuelta a Chengdu y preparando el traslado a la provincia de Yunnan.
Saludos chinorris.

miércoles, 3 de noviembre de 2010

CHENGDU (SICHUAN). CENTRO PARA LA CRIA DEL PANDA.

El primer día en Chengdu se nos pasó rapidísimo por las dimensiones de la ciudad, pensábamos que iba a ser mucho menos grande de lo que es, ya que al parecer viven más de cuatro millones de habitantes. Si a eso unimos que la ordenación urbana nos ha parecido de lo más caótico -un término medio entre Roma y El Cairo- hemos decidido desplazarnos en taxi y hacer la visita a los pandas que organizaba el hostel.





El parque o centro de investigación es una isla verde de tranquilidad justo al lado de la ciudad. No se escuchan apenas ruidos, existe un lago bastante grande para cisnes con la decoración típica, y todo un recorrido verde con troncos y ramas de bambú por todos lados.

Los dos primeros pandas están dormidos, el primero en lo alto de un árbol (reciote el panda y reciote el árbol), y el segundo encima de unos troncos, por lo que vamos poniendo cara de asombro pero todavía con espectación.




El siguiente ya se encuentra comiendo bambú como si le fuera la vida en ello (le debe de ir un poco en ello), precioso!, que cosica!, parece un peluche grande! (fotos a discreccion y a limpiarnos las babas). Los siguientes en diferentes posturas y repitiendo de lo mismo, estamos encantados.




Después pasamos a la zona de los pandas rojos, una mezcla de zorros y mapaches muy exótica, a lo mejor no tan tiernos, pero como son bastante más activos despiertan mucho nuestra atención (superfoto tomada por Isabel).



Terminada la visita a los pandas rojos, nos acercamos a la zona de cría, donde nos enseñan cinco oseznos que están durmiendo en una cuna y otro más al que le están dando un biberón; aquí haremos fila una vez más, ya que no nos hemos fijado muy bien... je, je. Y por fin video explicativo y vuelta a la ciudad.


Para los que se preocupan por nuestra dieta: Hemos encontrado un restaurante Mozárabe bastante majo, en el que nos hacen la pasta fresca en el momento, nos llenan el plato como si fueran nuestras madres, y encima nos dan un caldico de ternera para que no cojamos frío. Y el arroz muy suelto, así que no preocuparse mucho.


Hasta el siguiente capítulo.

martes, 2 de noviembre de 2010

DOS DIAS EN CANTON (Guangzhou). SURCANDO EL RIO DE LAS PERLAS.

Hola de nuevo a todos. Hong Kong-Canton en tren expreso, pasamos la aduana y ya estamos en China.
El primer dia, tranquilo: comemos un arroz con carne de... en un puesto callejero y nos marchamos a dar una vuelta a nuestro aire. Montones de tiendas de todo tipo, y de nuevo calles temáticas dedicadas a un gremio exclusivo.




Después nos dirigimos a la isla de Shamian, una zona con edificios de origen europeo de la epoca de las guerras del opio y que fue cedida a Franceses, Ingleses y demás, para usos comerciales, por lo que todos los edificios y calles tienen un aire occidental. Nos hacemos un montón de fotos con las diferentes esculturas metalicas que adornan las calles. Esta zona también se encuentra plagada de gente haciéndose fotos al estilo de "books" personales, porque los vemos superarreglados para la ocasión, al igual que muchas parejas de novios también se están haciendo sus fotos vestidos con el traje de boda (les debe parecer un lugar exótico).





Por la noche, ya que estamos de vacaciones, nos regalamos un crucerillo por el río. Una hora y media aproximadamente viendo las orillas del río con la mayoria de sus edificios y los puentes adornados con luces de colores, parece la Sky Line de Guangzhou.
Al día siguiente toca patear la ciudad y visitar los sitios mas característicos.






El Primero la Catedral del Sagrado Corazón, para que luego digan nuestras madres. Parece mentira que estemos en china, en medio de la ciudad se levanta una catedral que poco tiene que envidiar a las que hemos visto en Europa. Llena de vidrieras en el interior y con un enorme rosetón en la fachada, muy bonita. No pudimos rezar mucho porque la biblia estaba en chino y todavía no lo dominamos.


El segundo y por aquello de la alianza de civilizaciones, la mezquita, a la que no pudimos entrar por no ser creyentes musulmanes, eso si, en la entrada nos vendian frutos secos y pasas. Eso que nos ahorramos en frutos secos.




El tercero el Templo de Liu Rong o de los seis banianos con su pagoda de 57m y un milenio de antiguedad. De los banianos ya no queda ninguno, pero la pagoda por sí sola ya es suficientemente interesante.





El cuarto, el templo de los cinco inmortales, un templo muy bonito, muy bien arreglados los jardines, un estanque con peces de colores, su torre de la Campana, su torre del Tambor, sus Budas... muy apanyao (no hay manera de escribir la enye, ainch!).


Hacemos un alto en el camino, que ya es hora, y comida en el Kung fu, cadena de restaurantes estilo Mc Donald's pero con hamburguesas de Tofu, ensalada caliente, refresco de soja y arroz y noodles los que quieras.


Por la tarde la Casa Chen, museo de artesania tradicional en el que se muestran tallas de marfil que son autenticas virguerías, abanicos y pai-pais y sobre todo los distintos edificios que los albergan, con decoracion en fachadas y tejados mezcla China y Japonesa, muy llamativa.

Para terminar el día paseo por el parque grande (Yuexiu) y a dormir que nos vamos a Sichuan.